Por más de 30 años, la actividad física ha sido el enfoque principal cuando se promueve la salud en los lugares de empleo. Los retos con podómetros, clases de yoga, programas para perder peso, entre otros, han sido el estándar cuando hablamos del “bienestar en el lugar de trabajo”.

Con la evolución del bienestar total del ser, más empresas están expandiendo sus servicios para atender otras áreas importantes en la vida de sus empleados como su desarrollo profesional, financiero, en la comunidad y su bienestar social. Según la organización Gallup, bienestar físico significa tener buena salud y suficiente energía para hacer las cosas que necesitamos llevar a cabo. Aún más, tener la energía necesaria incluye observar cómo ejercitas tu cuerpo, qué es lo que comes y qué tan bien duermes.

Qué es lo que comes

Muchos creen en la filosofía de bienestar Blue Zones,  que promueve el alimentarse con comida real. Como latinos, nuestra cultura se basa en comidas hechas en casa y cenas familiares. Estar más conscientes de lo que comemos y la manera en la que cocinamos es algo que debemos considerar. Podemos mejorar nuestras comidas añadiendo más vegetales, cocinando con aceite de oliva o de canola, optando por carnes magras y reduciendo las cantidades de sal.  Cuando cocina uno en casa, no se necesita preocuparse tanto por lo que hay en el plato porque se sabe lo que se puso en la olla.

Cómo ejercitas tu cuerpo

Hace unos años se iniciaron investigaciones acerca de los riesgos de estar sentados todo el día…lo cual es lamentable cuando casi todo lo que hacemos requiere que… ¡estemos sentados todo el día! Ahora, más que nunca, sabemos lo importante que es incorporar la actividad física en nuestras vidas cotidianas. Limpiar la casa, ir caminando a recoger a los niños de la escuela o salir a caminar al parque después de la cena es bueno. ¡Bailar en la sala de tu casa también es buen ejercicio! 

Qué tan bien duermes

Dormir rejuvenece y es vital para nuestro bienestar. Aunque nos referimos a nuestro bienestar físico es importante mencionar que las emociones, el estrés, la estabilidad mental, entre otras, se ven afectadas por la calidad del sueño y la cantidad de tiempo que dormimos.

¿Sabías que dormir bien te convierte en un superhombre? Tu corazón y los vasos sanguíneos se recuperan mientras duermes. De hecho, la privación de sueño continua está vinculada con varias enfermedades y condiciones médicas como la diabetes, obesidad, enfermedades cardiovasculares y derrames cerebrales.

Además, el sueño apoya la función del sistema inmunológico y el crecimiento y desarrollo saludable. Las hormonas que se liberan mientras duermes profundamente ayuda a la formación de tejido muscular y ayuda a reparar las células y tejidos en niños, adolescentes, jóvenes y adultos.

Así que, sino duermes bien, ¿cómo pudieras mejorar tu sueño? Para los que empiezan a cuidarse, que esto sea una prioridad. Ambienta un lugar en tu hogar que sea tranquilo y relajante para dormir y sigue una rutina para ir a descansar por las noches que incluya momentos de quietud, música o lecturas que te relajen y evita comer o tomar, estar frente a monitores o pantallas o hacer ejercicio por las noches. 

Sé bueno contigo mismo. Al comer alimentos saludables, mover más tu cuerpo y priorizar un buen sueño, cuidas aspectos importantes de tu bienestar general.

Fuentes: What Wellbeing Means in the Coronavirus Era,  Gallup, 2020; Live Longer, Better,  Blue Zones, 2020; Blue Light Has a Dark Side,  Harvard Health Publishing, Harvard Medical School, 2020.

Originalmente publicado 09/08/2016; Actualizado 2021